Revista PODIUM, enero-marzo 2017; 12(1):67-70

Quinito, Gloria del Ajedrez Pinareño

Quinito: chess glory of Pinar del Rio

Hildalina Pérez Álvarez1, Claudia Permuy Díaz2, Manuel Alejandro Díaz Pérez3

1Licenciada en Educación. Especialidad Marxismo Leninismo e Historia. Máster en Educación. Profesora auxiliar. Departamento de Marxismo Leninismo e Historia. Universidad de Pinar del Río «Hermanos Saiz Montes de Oca». Correo electrónico: hildalina.perez@upr.edu.cu
2Máster en Ciencias. Departamento de Matemática. Facultad de Ciencias Técnicas. Universidad de Pinar del Río «Hermanos Saiz Montes de Oca». Correo electrónico: claupd@upr.edu.cu
3Ingeniero Informático. Facultad de Ciencias Técnicas. Universidad de Pinar del Río «Hermanos Saiz Montes de Oca».
Correo electrónico: manuel.diaz@estudiantes.upr.edu.cu

Recibido: 2 de febrero de 2017.
Aprobado: 22 de marzo de 2017.


El mundo de las 64 casillas tuvo en Joaquín Carlos Díaz Díaz conocido por Quinito un digno representante en la provincia vueltabajera, donde fue conocido como el rey del ajedrez pinareño. Aunque ya no está entre nosotros su legado continúa como incentivo entre los que practican el juego ciencia, y muestra de ello, es la sala de ajedrez que lleva su nombre en la Universidad de Pinar del Río Hermanos Saíz Montes de Oca; Facultad de Cultura Física Nancy Uranga Romagoza donde se estudia la carrera de Cultura Física y que forma parte de un proyecto institucional de la nueva universidad integrada Hermanos Saiz Montes de Oca.

El apodo entre sus admiradores del juego ciencia de «la bestia táctica» fue el título que puso a uno de sus artículos el veterano ajedrecista Gerardo Lebredo y al respecto escribió en Bohemia: «Aunque nada tenía que ver con su humanismo y simpatía el ganador de esta partida es respetado por sus colegas de generación con el titulo de nuestro articulo de hoy. Cuan desbordante fuerza le reconocía este sobrenombre a su arte para conducir la lucha jugada a jugada».

El Maestro Internacional pinareño con una norma de Gran Maestro, Joaquín Carlos Díaz Díaz (Quinito), tuvo una rica trayectoria en su vida como baluarte del juego ciencia lo que quedó constatado en su meritoria participación en eventos nacionales e internacionales donde obtuvo numerosos premios y reconocimientos, entre estos figuran:

Participante en las olimpiadas mundiales de:

Lugano, Suiza (1968).

Siegen, RFA (1970).

Skopje, Yugoslavia (1972).

Novi-sad, Yugoslavia (1990).

En estas cuatro olimpiadas, acumuló 18 puntos de 30, por 12 victorias, 12 tablas y 6 derrotas, para el 60% de los puntos.

Campeón y mejor tablero en el Campeonato Centroamericano y del Caribe en San Salvador, El Salvador, en el año 74.

Medalla de oro en el tercer tablero en el Campeonato Mundial Estudiantil. Año 1974 en Tee-Side, Inglaterra.

Campeón Zonal 7 Centro América y el Caribe. Año 1975 en República Dominicana.

Participó en el Torneo Interzonal de Biel, Suiza, en el año 76, valedero para el Campeonato del mundo.

Sub- campeón Nacional. Años 1987, 1988.

Campeón panamericano por equipos. Año 1987 en Junín Argentina.

Campeón panamericano por equipos. Año 1991 en Guarapuava, Brasil.

Ganador del Circuito Brasileño. Año 1995.

Participó en eventos ajedrecísticos en 34 países donde derrotó a cerca de 50 Grandes Maestros. Entre ellos: Andrei Sokolov, Alonso Zapata, Gildardo García, John Fedorovich, Julio Granda, Henry Hurday, Miguel Ángel Quinteros, Ratmir Jolmos, Zilberman Lutz,Espig, Guillermo García, Silvino García, Amador Rodríguez, Walter Arencibia, Reinaldo Vera, Evgueni Pigusov, Kirt Lageweg, Levente Lengel, etc.

Quinito fue el primer pinareño reconocido en Cuba y el mundo como ajedrecista y el primer cubano que se enfrentó a Anatoli Karpov, excampeón mundial del juego ciencia, el cual en una visita realizada a la Habana así lo reconoció.

Por otra parte, es preciso señalar que durante muchos años se mantuvo como el ajedrecista más destacado del año en Pinar del Río. Ostentó el mérito de haber sido fundador, como jugador, de los primeros Juegos Escolares nacionales en Cuba y medallista de oro.

En 1975, obtiene el primer Título Internacional en la provincia y logra el Título de Maestro Internacional en el Torneo Centroamericano Zonal de Santo Domingo, República Dominicana, clasificando para el Torneo Interzonal al ganar el primer lugar en uno de los 2 grupos eliminatorios en disputa.

Su norma de Maestro Internacional contribuyó al vuelco total de la provincia pinareña que por muchos años solo tuvo un ajedrecista con esta norma que representara a la provincia nacional.

En 1987, gana Joaquín C. Díaz el Grupo Premier II del Torneo «Capablanca in Memorian», celebrado en Camagüey y obtiene la 1ra. Norma de Gran Maestro, titulo más alto alcanzado por un jugador de la provincia en ese momento y que dedicó en una entrevista concedida al periodista Jesús Bayolo en Juventud Rebelde a nuestro líder histórico, Comandante en jefe, Fidel Castro Ruz, por quien sentía gran admiración.

Numerosos fueron sus aportes al desarrollo teórico del ajedrez pues sus partidas fueron publicadas en las principales revistas y diarios; entre ellas se encuentra el Informador Teórico, como modelo de ajedrez de avanzada, aportando razonamientos teóricos con altos resultados en la variante del Dragón, su principal y temida arma cuando conducía las piezas negras.

Su lealtad a la patria, responsabilidad y dignidad como atleta revolucionario le permitió viajar por más de 34 países, entre ellos en el continente americano: Canadá, Argentina, Colombia, Nicaragua, México, El Salvador, Venezuela, Brasil, Dominicana, Jamaica, Ecuador, Bolivia, Panamá, Perú y Barbados y en el continente europeo: España, Francia, Portugal, Italia, Bélgica, Inglaterra, Andorra, Suecia, Suiza, Dinamarca, Yugoslavia, Bulgaria, Checoslovaquia, Alemania Democrática, Alemania Federal, Hungría, Austria, ex URSS, Polonia, Rumanía, Armenia y kirguisia.

Por largos años se mantuvo viajando sin traicionar jamás sus convicciones, en múltiples invitaciones a eventos realizados en el extranjero y muchas veces asistiendo solo. Puso en alto el nombre de Cuba. No aceptó jamás sobornos ni ventas de partidas; Ejemplo de ello, en Brasil en 1995 ofertaban 200 reales (220 dólares en aquel momento), por vender las partidas y nunca claudicó; su postura intransigente era conocida por todos los atletas de varios países.

Quinito era una personalidad afamada por su talento en el tablero, sin embargo, era desprendido, sencillo y modesto lo que lo llevó a donar premios en divisas a la Revolución, de forma desinteresada, a lo largo de toda su trayectoria ajedrecística.

Es de destacar que en su labor como pedagogo fue un ejemplo de consagración. Era admirable su laboriosidad y dedicación para hacer de cada jornada una entrega sin límites a la tarea de enseñar a sus pupilos a los cuales guiaba por el camino correcto para llevarlos a la cima y dejar en ellos una huella de sus más altos valores caracterñisticos del deporte revolucionario cubano. Sus alumnos obtuvieron más de 20 medallas en juegos nacionales escolares y juveniles, así como ganaron el campeonato provincial de 1ra. categoría en varias oportunidades en ambos sexos.

Entre los hitos del juego ciencia en la provincia pinareña figura la hazaña de su alumna en aquel entonces, la ajedrecista Zenia Corrales Jiménez que con solo 13 años gana el Campeonato Nacional Juvenil en Las Tunas, invicta con 6 ½ puntos en 7 partidas; la provincia de Pinar del Río ocupa el 1er. Lugar Nacional, por primera vez en la historia de los juegos nacionales juveniles.

También logró convertir en GM al primer pinareño que alcanzó esta categoría, Fidel Corrales; i mpartió más de 25 cursos para entrenadores y jóvenes atletas.

En la etapa final de su vida afectada por serios problemas de salud, Quinito regaló a la afición pinareña en el torneo «Tras las Huellas del Che» el primer lugar individual en el primer tablero y por equipo, donde fungió como capitán del equipo de veteranos. Nunca renunció a seguir entregando todo su amor y consagración a la tarea de encaminar todos los esfuerzos posibles a pulir las mentes de los que a su juicio constituían promesas para el ajedrez pinareño, y en ese afán, se desempeñó como entrenador del campeón juvenil pinareño William Hernández.

También colaboraba como analista de la Gran Maestra pinareña Lisandra Ordaz, primera en el ranquin de las féminas cubanas y de su alumna, la Maestra Internacional Zenia Corrales.

Su deceso el 11 de junio de 2015 constituyó una sensible pérdida para el ajedrez pinareño que siempre encontró en este extraordinario hombre un defensor del deporte ciencia y un apasionado amante de las ideas de Capablanca, el Che y Fidel de masificar y desarrollar el talento y las habilidades intelectuales mediante su enseñanza en las escuelas y su práctica sistemática.

 

CONCLUSIONES

Los referentes históricos que se han expuesto sobre el Maestro Internacional pinareño con una norma de Gran Maestro, Joaquín Carlos Díaz Díaz (Quinito) constituyen una contribución al conocimiento de las personalidades la historia local y en particular del juego ciencia en Pinar del Río, de aquellas han marcado verdaderas pautas en este proceso.

 

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

[1] Benitez Ordoñez A. O. y Rosales del Pino, R. (2004). Apuntes históricos del ajedrez en Pinar del Río. Ponencia presentada en Evento Científico del INDER Provincial. Pinar del Río.

[2] De Osaba, M., & Goenaga, J. A. (2004). Cultura Física y deportes: Génesis, evolución y desarrollo (Hasta la Inglaterra del siglo XIX).

[3] Lebredo, G. (2015). La bestia táctica. Revista Bohemia, 7,13-17.

[4] Morejón, M. L. (2005). Papel del Deporte pinareño en los Juegos de las Olimpiadas Modernas. (Trabajo de Diploma), Instituto Superior de Cultura Física, Pinar del Río.

[5] Martín Batista, O. y López Hernández, M. A. (2000). Apuntes de la historia del Deporte en el Municipio de Pinar del Río. (Trabajo de Diploma), Instituto Superior de Cultura Física, Pinar del Río.